De los días de ocio.

Entrándole a la pre-etapa navideña para mí todo parece ociosidad; el ocio es malo y como bien dicen el ocio es el inicio de todos los males, no sé como sea la frase pero la idea ahí está. En mi caso no es tan tan así. Por ejemplo en las mañanas piensan todos que estoy holgazaneando pero no, y me dicen que me ponga hacer algo de provecho. Que si estoy en mi cuarto piensan que estoy dormido, que si estoy viendo la televisión piensan que veo caricaturas, que si estoy en la compu ya estoy en fake-book o viendo chicas desnudas; a mí no me gusta ese tipo de cretinismo.

Como ya es natural en mí, en cuanto tengo tiempo libre trato de leer o hacer cosas que creo yo me servirán para ser un anciano de esos que cuentan anécdotas a los nietos de otras personas; es una etapa en la que le denomino “Época de cultivo” y no precisamente porque cultives hortalizas.

Me imagino que ya te estás riendo pensando las estupideces que digo; pues te diré: Me importa un pito.

Hay un dicho que dice “Lo que se sabe es una gota de agua; lo que se ignora es el océano”, ahí nada más se las dejo.